Marisa Balducci

Muchas gracias por visitar mi página.

Todo lo que está aquí está hecho desde el corazón, porque desde ese lugar empezó mi motivación para pintar MANDALAS.

Desde mis épocas de diseñadora gráfica, pasando por etapas de pintura sobre tela, naturalezas y dibujos lineales, siempre fue la pintura junto a la guitarra, mi hobby. Hasta que apareció la enfermedad que llega cuando vas por el camino equivocado; y un día mientras sanaba, mi sobrina Jazmín de 9 años me pintó un dibujo y lo pegó en la nevera con un imán, cuando lo vi me atrapó y le pregunté: “¿Qué significa ese dibujo?” y me contestó “Es un MANDALA, yo los pinto para relajarme.” En ese momento pintaba láminas con figuras geométricas que en poco tiempo se transformaron en MANDALAS. La meditación y mi terapia con los MANDALAS hacen que mi enfermedad sea un recuerdo.

Estos MANDALAS que hicieron tanto bien en mí, espero que puedan ayudar a quien los tenga en sus casas.

Pintar, dibujar o meditar con MANDALAS es un viaje interior que nos lleva a conocernos y encontrarnos con nuestro ser. Tener un MANDALA con nosotros nos da armonía, equilibrio y energía positiva.

Todos podemos encontrar nuestro camino, sólo hay que estar atentos a las SEÑALES